martes, 17 de marzo de 2015

Comunidades Virtuales Y Su Potencial Educativo

Nuestra sociedad, hoy en día camina diferente a como lo hacía hace 20 años; se han producido múltiples avances en todas las áreas, pero debemos destacar los avances tecnológicos que ha traído consigo esta era, avances que sin pensarlo dos veces, nos llevan a la red, a la internet. Hemos visto cómo la sociedad de hoy gira en torno a esta, casi todas las sociedades existentes están en constante uso de la red; la cual se ha convertido en la nueva forma de relacionarse, de tener una vida en sociedad y se ha vuelto inherente a la vida del ser humano.
Para hacerlo se han creado una infinidad de comunidades virtuales o cibersociedad dentro de la red en todo el mundo, las cuales se han creado para diversos fines. Aquí entran en juego muchas cuestiones, que hacen dudar si son efectivas y si conviene utilizarlas. En efecto, tiene sus ventajas y sus desventajas.


Como toda comunidad, esta tiene que estar conformada por miembros que compartan características, gustos, costumbres e intereses en común, a nosotros nos compete hablar de las comunidades virtuales con fines educativos, las cuales han tomado mucha fuerza en los últimos años, tanto que el día de hoy en muchos lugares, es considerada como una herramienta más para el desarrollo del aprendizaje.
Esto, como menciona Steven G. Jones se deba a que “Todos los medios de comunicación, por ejemplo, han sido aclamados por su potencial educativo. Radio y televisión, en particular, fueron ya en su momento promovidos como herramientas educativas y la CMO no es diferente. Cuando se introdujo la radio y la televisión, se puso el énfasis en retransmitir por interés, conveniencia y necesidad pública. La retórica que envuelve al desarrollo de redes comunitarias es similar. No deberían desecharse estos esfuerzos demasiado apresuradamente, pero es preciso que haya un análisis crítico. John Quaterman, pionero del trabajo con interredes dijo que “Radio y televisión produjeron una sociedad distinta. Las redes informáticas también lo harán.” Por ello es que se le ha considerado como una herramienta más para la educación.
Las comunidades virtuales, favorecen el desarrollo profesional y social, donde personas con los mismos intereses y fines pueden buscar, adquirir y compartir información con personas de todo el mundo, esto hace que el trabajo sea más rico y por lo tanto más efectivo.


¿Y cómo podemos utilizarla?
Debemos de tener cuidado qué tipo de información estoy recibiendo, y qué tan confiable puede ser la fuente, por ello también es recomendable hacer comunidades virtuales con personas que conozcas, aunque esto no siempre es necesario, todo depende del objetivo que se esté buscando.
Para un aula en particular, resulta de mucha ayuda, ya que da pie al trabajo colaborativo, al debate y a la retroalimentación.
Las comunidades virtuales también ayudan cuando falta el tiempo, algún recurso, etc. Y siempre le ayudarán al maestro a actualizarse y así mejorar su trabajo tanto dentro como fuera del aula.
También debemos tener en cuenta que el proceso de aprendizaje puede unir a la gente en la medida en que tal aprendizaje pueda ser colaborativo, pero del mismo modo puede ser frustrante y desesperanzador. La exclusividad, inflexibilidad, aislamiento, rigidez, homogeneidad, por las que Schuler23 criticó el “viejo concepto de comunidad” también puede arraigar a las comunidades mediadas por ordenador.
Es por ello que debemos cuidar de nuestras actitudes y valores como en cualquier comunidad, sin olvidar que la comunidad se formó para mejorar el trabajo en el aula y no para perjudicarlo.
En conclusión, podemos decir que las comunidades virtuales son hoy por hoy una herramienta que puede ser utilizada con fines educativos, ya sea desde un salón de clases, a una escuela, a un estado,  a un país, a muchos países; y  que si ésta es bien utilizada, puede lograr un aprendizaje mayor y significativo tanto para el alumno, como para el maestro.